jueves, 24 de marzo de 2011

Tuve que parar por un momento y pedirle a Charly que me asesinara una vez más. Luego pensé en el humo, en las diversas circunstancias y razones del humo, se me antojó terco, sucio, infame, pero también azul, delicado, poético. Recordé la séptima y ese humo negro, triste y nauseabundo que no es mucho más (ni mucho menos) que una sensación olfativa sumamente desagradable, que implica cruzar la calle con mala cara y de mala gana, repugnante masa negra, multitud. Luego recordé lugares específicos en que el humo y yo construimos un momento, bailarín, bohemio, tranquilo, etéreo, invoca mi mente un fondo negro en que jugaba, ascendiendo sin afán al cielo que no le prometieron, desde la boca de un cuerpo que no le importaba.

Luego encendí un cigarrillo, aunque no fumo..

Ya pensé en la muerte pero sigo vivo



"El problema de abrir la puerta..el amor o la paranoia, el jamón o el queso..grandes dilemas de la humanidad.." (Charly García)

Búscame en la basura donde el dominio no existe
Búscame donde te encuentre la locura
Búscame donde la edad se confunde con el sol

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